sunshine, lollipops and rain drops

que se rian los muebles.
bruce campbell hace una aparicion estelar en los aledaños de mi mente transtornada, y fijaos bien, es sabado y seguro que los cielos estaran mas o menos despejados. hace un dia estupendo, nadie lo duda, y daniel day lewis me espera esta tarde en las butacas, extrayendo petroleo bajo las ordenes del gran grandisimo paul thomas.
en dias como hoy me alegro mucho de ser quien soy, incluso siendo otra persona completamente igual pero con otros calcetines, calcetines que nunca llevaria un tenista a menos, claro esta, que no estuviera jugando al tenis. los cielos despejados y el viento soplando en rachas muy muy moderadas, da gusto saber que son vacaciones, que apenas acaban de empezar, que son como una hoja en blanco.
da gusto saber exactamente donde esta la caja de ceras y ser lo que quieras, pintar banderas, pateras, maderas, carteles tirados en aceras. hoy soy marc chagall, soutin y su colega comun, modigliani, y vivo en un piso de paris, pintando cuadros para ella sin que lo sepa; nada me hace mas feliz que el romanticismo rancio de amante rechazado, despechado, desojado (que no deshojado, me refiero al amor ciego tan cacareado, graznado, mugido) y especialmente descojonado.

hay tres puntos en comun entre el oceano y yo: primero, la amplitud, segundo la imprevisibilidad y tercero, y mas importante, que el cielo, despejado o no, se refleja en mi.
buenos dias y just remember the sunshine always follows the rain.